Los venezolanos y el gobierno del Presidente Nicolas Maduro
van llevando con elegancia su primer desafío tras la ajustada elección en la
que se aproximaron numéricamente las opciones enfrentadas: la ultraderecha
regresionista que sigue desde hace años los guiones del imperio y la revolución bolivariana que promete
profundizar el recién proclamado mandatario
Unos 280 mil votos de diferencia -con detrimento numérico
del legado del Comandante Chávez- son una inobjetable victoria -según los más
exigentes estándares electorales reconocidos internacionalmente- pero la
derecha pro imperialista en su desesperación y locura optó por des-conocer los
resultados de la votación aplicando ciegamente un plan trazado desde afuera que
confirma -una vez más- el desconocimiento que tienen el imperio y sus
seguidores de las nuevas realidades que constituyen el legado chavista y las
lecciones aprendidas en las décadas recientes por el pueblo de Venezuela
El desconocimiento del resultado y un frustrante llamado a
‘negociar’ que hizo el candidato perdedor a Maduro poco antes de que se dieran
a conocer los resultados electorales disparó el llamado al ‘cacerolazo’ y a los
bárbaros ataques perpetrados por agresivos núcleos que atacaron centros de
salud integrales, núcleos de viviendas populares, sedes del principal partido
de gobierno y otras instalaciones
Esa opción violenta -con saldo de 7 muertos y numerosos
heridos y acosados- se jugó mediante focos múltiples en la capital y en
diversas ciudades del país en donde además se atacaron las viviendas de
diversos representantes del estado bolivariano – La intención era desatar
enfrentamientos sangrientos entre las hordas atacantes y el pueblo venezolano
para aplicar el modelo de las ‘primaveras árabes’ que rindió al imperio oscuros
resultados: no han logrado generar ‘democracia’ en ninguno de los
países pero en todos se crearon condiciones para el intervencionismo abierto
del imperio y sus agentes
El primer desafío de desestabilización y ‘anarquía’ el proclamado Presidente Maduro y el pueblo venezolano lo han enfrentado con éxito y serenidad
en medio de voces crecientes que llaman a la profundización del proceso
bolivariano pues el relativo retroceso electoral del chavismo se fundamenta
-según diversos analistas- en fallas y deformaciones que ese movimiento debe
afrontar y superar
Las acciones de profundización del cambio social en la
Venezuela 2013 y para marcar futuro socialista deben apuntar -por una parte- a erradicar
fenómenos atribuibles al amplio manejo económico que aún conserva la burguesía
venezolana y -de la otra- a superar deformaciones
que subsisten tanto en ciertos sectores del principal partido de gobierno como
en aparatos del gobierno y del estado bolivarianos
¿Cómo ampliar la base social [entre sectores populares y de
otros trabajadores que aún se confunden ante las sucias campañas de la derecha
y el imperio] para profundizar el proceso y volcarlo al socialismo? Es el
desafío de fondo pues esa gran meta solo se alcanzará mediante la fortificación
del poder popular naciente y hasta ahora esbozado… ese poder popular tiene que
crecer en su desarrollo político, ideológico y de reales acciones constructivas que
modifiquen la estructura dominante heredada a Venezuela por la hoy
‘enloquecida’ burguesía dependiente que persistirá en su ‘acción’
desestabilizadora
Son muchos -inmediatos y de fondo- los desafíos para el
Presidente Maduro y para Venezuela toda pues el imperio siempre ataca a través
de sus ‘asociados’ y sus expertos en generar ‘caos y desgobierno’ en detrimento
de la soberanía hasta ahora ganada para Venezuela, América latina y otros
países del mundo
El pueblo venezolano que ya conoce vive y valora el accionar
chavista en la vida social está llamado -estimulado y sin frenos pues Maduro es
uno de ellos- a generar espacios sociales propios para acoger en ellos al
decisivo caudal popular que ante falencias superables son desviados del camino ya
trazado por el comandante Chávez en la construcción de la Patria y de la soberanía
a la que están convocados históricamente /ema/
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